Willow. Florista y plebeya.
Yo era su rey, un gobernante despiadado y brutal que no se echó atrás. Y en el momento en que la vi supe que era mía. Tenía que tenerla, no solo en mi cama sino también a mi lado. Como mi reina.
Así que la sacaron de su casa e hice un trato con ella. Me aseguraría de que su madre enferma fuera atendida y pagara sus deudas si aceptaba una cosa. Ser mi esposa y llevar a mi heredero.
Lo que quería obtener, y lo único que quería mas que todas las riquezas y joyas del mundo era ella. Willow.
Muchísimas gracias!!
ResponderBorrarDe nada corazón, es todo un placer
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